Está enclavado en una moderna urbanización de anchas avenidas y aceras adornadas con naranjos. La propiedad se encuentra a diez minutos de Xabia, doce minutos de Dénia. A dos minutos de Gata de Gorgos, pueblo famoso por su artesanía y a tres minutos de Pedreguer. A cien metros de la propiedad se encuentran las veredas que se internan en la montaña virgen y salvaje en dirección al interior durante varias decenas de kilómetros.
La propiedad se encuentra en la parte más alta y tiene vistas a la propia urbanización, el parque natural del Montgó, el pueblo de Gata de Gorgos y la bahía de Xabia. En los días claros se ve Ibiza. Tiene una antigüedad de doce años.
Todas las ventanas tienes doble cristal, son de aluminio lacado y tienen mosquiteras. El interior está repartido en tres semialturas. La distribución es la siguiente:
En la planta de entrada se encuentra una habitación y un cuarto de baño completo. La habitación dispone de armario empotrado. El techo es abuhardillado, siendo la pared baja de 2,70 metros y la alta de 3,60 metros.
En la planta baja, (bajando 8 escalones), se encuentra la cocina independiente donde hay salida a un deslunado en el que se encuentra una pila con encimera, la caldera de la calefacción y el agua caliente y la instalación para lavadora. También se encuentra el salón con chimenea y la salida al jardín con un amplio porche cubierto.
En la planta superior, (8 escalones desde la entrada) se encuentra otro dormitorio, también con armario empotrado y techo abuhardillado como el anterior. A continuación una suite compuesta por un distribuidor donde hay un vestidor con cuatro puertas, una baño completo y un dormitorio también abuhardillado con salida a una amplia terraza.
Tiene instalación de Internet por fibra, conexión a gas ciudad, radiadores en toda la casa, aire acondicionado en todas las habitaciones y el salón, chimenea, alarma, piscina comunitaria y parking privado. Calle privada cerrada con puertas y sensor luminoso de seguridad nocturna.
Vistas a los mejores amaneceres sobre la bahía de Xabia. Se ve el mar desde el jardín, el salón y las habitaciones. Incluso desde la cama.
